La Luz del Mundo, más IDÓLATRA que nunca

 El que es injusto, sea injusto todavía;
y el que es inmundo, sea inmundo todavía;
y el que es justo, practique la justicia todavía;
y el que es santo, santifíquese todavía.
Apocalipsis 22.11

Ya los expertos en sectas, en psicología y sociología lo habían advertido, una secta al sentirse atacada en cualquiera de sus partes y experimentando una posible pérdida del control de sus fieles cierra sus puertas, sus murallas mentales y comienza un proceso de mayor afianzamiento y dependencia psicológica hacia sus líderes, sus doctrinas y sus valores. Al mismo tiempo por supuesto, decreta cualquier crítica hacia la misma, como un ataque de Satanás para destruir “la verdadera iglesia o congregación de Dios en la Tierra”. Así lo han hecho sectas modernas como El Templo del Pueblo, el Mormonismo, el Davidismo, los Adventistas del Séptimo Día y por supuesto, el tema de este blog, la llamada iglesia La Luz del Mundo.

Me tocó vivir esa experiencia en la secta en 1997 como miembro activo. Una noche cualquiera viendo televisión abierta en México, precisamente los noticieros de TV Azteca, repentinamente aparece la noticia: “Secta en México podría incurrir en suicidio masivo”, y los avances noticiosos exponían a La Luz del Mundo como la secta mencionada. La cloaca se había destapado.

Ahí comenzó toda una odisea que terminaría aproximadamente en el 2000, cuando los medios se calmaron y seguramente Samuel pudo respirar, pero no sin antes hubiera sendas marchas organizadas por él para defender su “honorabilidad” por las denuncias de abuso sexuales cometidos por él hacía sin fin de mujeres, o inclusive hombres como Moisés Padilla. Hubo muchos programas televisivos (especialmente el de Ricardo Rocha), noticieros, entrevistas, programas de radio, revistas y periódicos que informaron sobre lavado de dinero, fraudes con terrenos, abuso de mujeres, hombres y niños, y más y más podredumbre.

Yo era un joven en aquel momento y estaba estupefacto.

De inmediato la orden de Samuel fue prohibir que observáramos noticias en TV, revistas o periódicos y radio que hablaran de él y sus crímenes. Las prédicas se circunscribieron a hacernos creer que comenzaba la persecución contra “la verdadera iglesia”, porque claro, “tanto crecimiento y prosperidad a Satanás no le gustaba”, “la iglesia católica con sus garras había pagado a personas para hablar falso testimonio contra el apóstol y quería frenar el sorprendente crecimiento”. El mismo Samuel en una de sus cartas pedía que no nos dejáramos engañar inclusive, por algún video que pudiéramos ver en el que él apareciera, ya que la tecnología había “avanzado tanto” que podría ser posible con tal de desacreditarlo.

Los coros comenzaron a cerrar filas en torno al “apóstol”, sus himnos eran una franca invitación a la batalla, a sufrir por Cristo, a unirse al “apóstol”, a seguir “Firmes y adelante”, porque “El lema De la Iglesia” era ese, ¡adelante! Nos invitaron a hacer marchas frente a la Secretaría de Gobernación (que el mismo Samuel organizaba) y todos los fieles acomodados en puestos de poder político usaron sus influencias para los permisos, para asistir a entrevistas de radio, todo, para lavar el nombre de Samuel y de la iglesia.

Al inicio de esta etapa, se comenzó por disimular la “honra” a Samuel. Los himnos dirigidos a él que claramente evidenciaban una adoración se comenzaron a usar con prudencia. Los temas de “elección” se dejaron descansar y se comentaban a discreción, claro, porque esta iglesia “no es idólatra”. De hecho, se cantó en cierto momento un himnillo ridículo que decía que “amábamos la vida”, todo, para demostrar que no seríamos capaz de suicidarnos si Samuel nos lo pedía (acciones generadas por el famoso video grabado por Luis Reyes).

Un afamado antropólogo francés que vive en México opinó que LLDM jamás haría algo semejante al suicidio colectivo del Templo del Pueblo, ya que, claramente se ve que los dueños de la secta están más interesados en las riquezas “de este mundo” que en las celestiales. Totalmente cierto.

La iglesia se unió, sí, completamente. Cerramos filas ante el “ataque de las legiones de Satanás”, quien quería frenar a toda costa la obra de Dios y detener a su “ungido”. Lo creíamos a pie juntillas y de alguna manera salimos airosos de los comentarios de los vecinos y amigos sobre el tema. No pasó a mayores y sí, la “honra” a Samuel se fortaleció en una época en que no había redes sociales, ni Facebook, ni X, ni ninguna otra red social. No pudimos medir si la situación había generado algún éxodo masivo.

Al final de la época de “persecución” la idolatría comenzó a crecer. Nos comenzamos a descarar con esto de la “honra” y se volvió desmedida. Los mismos ministros competían a ver quién se aventaba la frase más honrosa, resultado de una fe que iba “creciendo” se apoyaban en ese verso:

No nos gloriamos desmedidamente en trabajos ajenos, sino que esperamos que conforme crezca vuestra fe seremos muy engrandecidos entre vosotros, conforme a nuestra regla;

2 Corintios 10:15

De hecho, eso fue lo que, después de tantas experiencias y un serio análisis bíblico pude darme cuenta de la idolatría que llevábamos a cabo en cada culto, sobre todo, en aquellos donde se exaltaba la figura del “apóstol”. Habíamos llegado a un nivel que ya no teníamos consciencia de la abominación que estábamos cometiendo y la Hermosa Provincia era el centro de la decadencia. Ya nunca NADA fue suficiente para ADORAR a Samuel. Hasta su misma muerte fue un derroche de lujo digno del becerro de oro de La Luz del Mundo. Para estas fechas, ya había yo dejado mis actividades en la secta y me había alejado junto con otros compañeros.

Pero la iglesia aún debía caer más bajo que aquella vez.

Esta misma historia, vuelve a repetirse

Al ser arrestado Naasón, los que vivimos lo del 97 ya nos la sabíamos. El proceso fue el mismo, los discursos, los mismos. Satanás otra vez arremetía con todo su poder contra la iglesia y ahora, en Estados Unidos porque claro, la Santa Cena en San Bernardino no les había gustado a las grandes congregaciones estadounidenses y todas juntas deseaban “frenar” a LLDM. La historia de 5 años ya la conocemos.

Hay momentos en que creemos que ya nada nos sorprende de la secta y sin embargo nos llegan a sorprender nuevamente. A rato sus estrategias parecen sensatas: quitar los logos naasonitas, eliminar algunos himnos idólatras, escribir el slogan “Santidad a Jesucristo” en los altares y cantar solo himnos cristianos en cultos naasonianos (hasta parece que se vuelven cristianos). Pero después aparece la idolatría en todo su esplendor y sin asomo de vergüenza. Sobre todo hoy que la sociedad está plenamente informada de que Naasón mismo se declaró culpable de solo tres casos de abusos sexuales a niños (de casi 30 delitos).

A pesar de todo ello, de que Naasón mismo confesara sus delitos, a pesar de que se demostró el lavado de dinero y congelaron sus cuentas, a pesar de que las mismas víctimas enfrentaron a Naasón y narraron los horrendos actos que cometía con ellas incluyendo sexo con animales, abuso sexual con sangre, parafilias indignas de alguien que predica la santidad, a pesar de que usó la investidura para coercionar y coaccionar a fieles sinceros para cometer crímenes, a pesar de que sus mismas hermanas le facilitaban jovencitos para sus perversiones sexuales y de que está claro que sus ministros de confianza y su propia familia era cómplice, los naasonitas (que se consideran CRISTIANOS) siguen ADORANDO más que nunca a su líder.

Entras a un culto y lo primero que oyes es sobre él, gracias a él, por él. Lo que sigue, es orar por él, luego, por su esposa, su familia, su madre y hermanos; luego, himnos que hablan de él o que se cantan a él, el coro posteriormente entonará himnos a su poder y gloria, ¿la prédica?, será sobre él, cómo amarlo, cómo adorarlo, cómo obedecerle, cómo seguirle; al final cerrarán con himnos que animen a estar con él y, en la oración de necesidades (de cada quién) se pondrá la “necesidad más grande”, él.

¡Ah! Pero aún no termina el culto. Después de la oración por la necesidad “más grande” sigue la “consagración” dónde se volverá a pedir por él. CINCO años pidiendo por él que está en prisión, por su salud, porque esté bien y porque salga pronto.

¿Por qué creo que LLDM es más idólatra que nunca? Porque a pesar de existir víctimas con nombres y rostros, porque a pesar de que se declaró culpa y purga una condena de más de una década y enfrentará otro proceso penal por crímenes VERGONZOSOS, su iglesia QUIERE SEGUIRLE ADORANDO, quiere seguir creyendo en su “apostolado”, quiere seguir cantando de él en conciertos públicos, quiere seguir PREDICÁNDOLO en redes, en radio, en tv. A pesar de saber que la sociedad la mira con pena, con lástima por su fanatismo ciego, sigue empeñada más que nunca en fortalecer su fanatismo, su fe ciega en Naasón y publicarla al mundo con evidente y perfecto descaro. Hoy más que nunca no cantan de él, le cantan a él como a un dios que les oye y que está presente por su clara omnipresencia.

 Te amamos oh Naasón, 
Por todo lo que nos das, 
Qué hermoso es vivir, 
Disfrutando de tu amistad.

El luzmundano se abraza a su dios-hombre, se aferra a su religión, a su “verdad”. Perder su fe en él es darle al victoria a Satanás quien ha usado a los medios de comunicación, a las autoridades de justicia de EU, a nosotros los exlldm, a personas que se hagan pasar por víctimas, al gobierno de México. Todo, para detener la “gigantesca obra de Dios que crece exponencialmente por el mundo y más ahora que Naasón está preso”.

Por eso, estimados amigos que tienen familiares en LLDM; explicarles que Naasón no es apóstol, que es un criminal y preguntarles por qué no pueden ver la realidad, no solo los hacer pensar que los ves como estúpidos, hace que se aferren aún más a él en la frontera de lo imposible. Y sabemos cómo reaccionarán porque así han sido entrenados durante toda su vida: te verán con odio, con desprecio y quizá podrían usar violencia contra ti.

Quizá hemos errado al delatar y evidenciar los crímenes de Naasón, las herejías de sus doctrinas y la falsedad de que LLDM sea la verdadera iglesia de Jesucristo (ni congregación cristiana es), porque eso ha hecho que la cúpula endiose aún más la figura del “apóstol” y que los hermanos se aferren a su “autoridad” anulando la consciencia de VERGÜENZA en sus vidas. Porque, ¿quién en su sano juicio predicaría perdón de pecados y salvación espiritual mediante un hombre que ha confesado mínimo, haber abusado sexualmente de 3 menores SIN MOSTRAR EL MENOR ARREPENTIMIENTO? Solo se puede responder de una manera: FANATISMO.

Conciertos disfrazados para celebrar el cumpleaños de Naasón, le cantan a él como si estuvieran presente, se inspiran, lloran; hacen grandes pasteles y verbenas públicas para celebrarlo, en las casas de los hermanos adornan un espacio con su foto, un pastel y flores a su alrededor ¡como altares! Saludan a un balcón vacío, cantan a un trono sin estar presente su rey, entonan su himno de bienvenida, levantan sus manos con palmas, saludan a las cámaras como si él les estuviera viendo, lloran y se extasían… la ABOMINACIÓN al fin pudrió todas las células de la espiritualidad de La Luz del Mundo.

PERO aún falta mucho porque ver. Llegará el momento en que los apóstoles de LLDM serán oficialmente declarados, Jesús en la Tierra, Dios-HOMBRE o el mismo Dios entre nosotros. Ya lo han hecho algunos, pero las grandes herejías en la secta así se han presentado, primero se le ocurre a uno, luego a dos y en esta bola de nieve idolátrica llamada “honra” ya todo cabe, todo se concibe, todo se vale y, llega el momento en que se vuelve dogma.

Sigamos trabajando, pero considero que hay algo que debemos cultivar mientras lo hacemos, aprender sabiduría. La sabiduría nos ayudará a saber cuándo, cómo y con qué podemos ayudar a los que aún siguen en la secta. La sabiduría, estimados hermanos, es la clave que nos dará el triunfo en nuestra lucha.

Que salgan los que deban salir, cuando deban salir y que puedan vivir una vida plena en libertad.

Dios me los bendiga.