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5 consejos para ser feliz después de LLDM

Esto es lo que he comprobado: que en esta vida lo mejor es comer y beber,
y disfrutar del fruto de nuestros afanes. Es lo que Dios nos ha concedido;
es lo que nos ha tocado”.
ECLESIASTÉS 5:18

Ya lo hemos dicho: salir de una secta como La Luz del Mundo para muchos, no es nada fácil.

Salir de LLDM y de la organización de los Testigos de Jehová suele ser un proceso difícil para la mayoría pues son instituciones diseñadas para que lamentes abandonar sus filas, pues te forzarán a perder a tu familia, a tus amigos, tu forma de vida; te harán sentir solo, muy solo hasta que te arrepientas de haberlos dejado o sufras para siempre la soledad.

En situaciones así, lamentablemente algunos han llegado al suicidio.

Pero hoy no quiero platicarte de eso, hoy, quiero humildemente compartirte mi punto de vista sobre lo que considero debemos hacer al salir de cualquier secta como La Luz del Mundo.

No existe fórmula

Si hubiera una fórmula que nos funcionara para ser felices a todos los que salimos o dejamos de creer en las doctrinas luzmundanas ¡qué fácil sería la vida después de LLDM! De hecho, no estaría aquí comentando nada y todos estaríamos en completa armonía donde hubiéramos decidido vivir.

Te cuento, conozco a Esther y a su esposo Israel, quienes al sufrir el rechazo de sus familias decidieron no depender de ellas para vivir plenamente y ahora, se ignoran mutuamente y ellos, Israel y Esther tienen una vida bonita y en paz con sus hijos lejos de las colonias luzmundanas. Consideran que pueden lograrlo y que no podrían estar para siempre sufriendo una situación que no pueden arreglar, pues la relación con sus parientes depende del reconocimiento de la divinidad de Naasón. Es una decisión respetable y que a ellos les funciona.

Natán y su familia, su esposa y cuatro hijos abandonaron la iglesia poco tiempo después del arresto de Naasón. Él dirigía el coro de su iglesia, cuando el ministro se dio cuenta que el coro cantaba menos himnos de “elección”, comenzó a sospechar hasta que le increpó en público, frente a los coristas. Natán expresó con Biblia en mano el error en el que estaban cayendo, el ministro lo corrió frente a sus compañeros y desde ese día jamás ha vuelto a pisar un templo naasonita. Pero las cosas no quedaron así, Natán tenía una tienda de abarrotes en la colonia de los hermanos, sus ventas comenzaron a bajar, sus familias comenzaron a rechazarlos y también a agredirlos, los hijos de los hermanos acosaban a sus hijos en la escuela de la colonia, la familia de Natán tuvo que abandonar su negocio, su casa y buscar paz y tranquilidad fuera del entorno luzmundano. NO ha sido fácil. El día que la madre de sus esposa (Bere) durmió (falleció), no les permitieron estar en el velorio, la misma familia les pidió que se retiraran y que no regresaran. Bere no puede superar la tristeza que le embarga por el abandono y rechazo de su familia, llora, se deprime y recuerda con nostalgia cómo cuando vivía en la fe de su familia, el amor entre ellos era el pilar de su estabilidad emocional. Pero tampoco quiere regresar, parece que la integración familiar se perdió para siempre.

Aunque existen miles de ejemplos como estos, la realidad es que cada uno de los que salimos somos un caso único y que no hay una situación que sea exacta a otra; ni las emociones, ni los carácteres son iguales en uno ni en otro. Por lo cual, lo que le funciona a uno posiblemente no le sería útil a otro.

Entonces… ¿qué podemos hacer?

Te voy a compartir 5 consejos que podrían ayudarte a conservar de alguna forma la estabilidad emocional que significa la familia y los amigos cuando decides dejar la secta LLDM o, has dejado de creer en las doctrinas fundamentales que la rigen. Recuerda, las fórmulas NO existen.

  1. EVITA DISCUTIR. Si tu familia es de esas que a pesar de no ser constantes en la oración son luzmundanos de hueso colorado, no discutas con ellos. Tantea, platica, da tus opiniones poco a poco. Si ves que se ponen a la defensiva, bájale de tono o inclusive, pasa a otro tema y después quizá regresa a intentarlo. Pero recuerda, que alguien razone lo que tú razonas no es algo que se pueda imponer por muy lógico que sea tu punto: la fe fanática es anti lógica, anti razonamiento y anti pruebas. Que nunca llegue el punto en el que te quedes sin familia y ellos con su fe más fortalecida en el fanatismo porque, una prueba de su fe, es rechazar inclusive a los de su sangre. Ten paciencia y por encima de tu razón, pon tu relación familiar.
  2. SÉ SABIO.
    El necio da rienda suelta a su ira, pero el sabio sabe dominarla. Prov. 29:11
    Nos cuesta reconocerlo, pero mucho traemos de LLDM lo NECIO y lo burlón. Lo orgulloso, GANAR a toda costa con razonamientos sin bases. Aprendimos a no dejar hablar, a no escuchar y a ALEGAR. Si quieres que tu familia y tus amigos te escuchen, evita HACER TODO ESTO. No solo demostrarás que has cambiado, que eres mejor persona y que sabes que eso no funciona, sino que también evitarás pleitos que únicamente lograrán que los pierdas y no, esto no es lo que Dios quiere (si crees en él) o, la mejor opción si has dejado de tener fe (respetable). Lo más difícil de este consejo es mostrar sabiduría porque lamentablemente al salir no dejamos los rasgos sectarios que la secta impregnó en nuestra personalidad. Pero, si logras ser sabio, tendrás familia, amigos y poco a poco, podrás ayudarles a salir de ahí.
  3. HAZ ACUERDOS.
    Les aseguro que si dos de ustedes se ponen de acuerdo, aquí en la tierra, para pedirle algo a Dios que está en el cielo, él se lo dará. Mateo 18:19
    Es posible que tu ética y valores no te permitan fingir que aún sigues creyendo. Seguramente ha habido serios conflictos desde que les has externado que ya no crees en Naasón y que con toda seguridad es culpable de lo que él mismo reconoció. Pero hay un punto en el que alguien comentó que lo mejor es no hablar del tema, déjalo así. No hablen del tema. La gran mayoría de luzmundanos no despiertan al momento, todo lo contrario, se aferran a su fe a pesar de no tener razón, porque se guían por la emoción, no por el entendimiento. No toques el tema, si viven juntos sigue tu vida y evade esos momentos que pueden explotar los buenos momentos familiares. No hay nada peor para una familia que un hogar que parece campo minado.
  4. DÉJALOS SER.
    Hasta un necio pasa por sabio si guarda silencio; se le considera prudente si cierra la boca. Proverbios 17:28.
    Tu familia y amigos van al templo, déjalos, no los juzgues, no intentes hacerlos cambiar de opinión a excepción de aquellos que manifiestan ciertas dudas o empatía con lo que entiendes. Evita confrontarlos, demuéstrales que aunque no crees en lo mismo, respetas. Si hablan de ofrendas que sabes que son inútiles (aunque te revuelva el estómago), calla. La realidad es que difícilmente lograrás hacerlos cambiar de opinión por algún comentario sarcástico de tu parte. En LLDM aprendimos a ser burlones. Evita cualquier burla que solo complique tu relación familiar. Si eres creyente debes saber que los tiempos son de Dios, y si no lo eres, también sabes que las cosas caen por su propio peso.
  5. CULTIVA LA PACIENCIA.
    El amor es paciente, es bondadoso. El amor no es envidioso ni jactancioso ni orgulloso. No se comporta con rudeza, no es egoísta, no se enoja fácilmente, no guarda rencor. 1a de Cor. 13:4
    Algunos han dejado de creer pero callan para evitar problemas, perder a la familia, a los amigos, el trabajo, la armonía social en sus colonias. Salir de LLDM como dijimos, es un proceso. Busca ayuda profesional, contáctate con exmiembros que te parezcan sensatos y sabios. Pide ayuda a Dios en oración y ten paciencia. Lamentablemente la PACIENCIA y la sabiduría son de las virtudes menos cultivadas en la iglesia y son la base para la supervivencia para después de la secta. No tienes que salir de la secta solo porque otros ya salieron, tú eres tú, un ser individual e independiente con características y rasgos personales diferentes a los que ya salieron. Hazlo a tu manera, a tu tiempo y permite que Dios guíe tus pasos. Lo que menos quiere Él de ti es que seas infeliz. Todo se dará a su tiempo.
  6. SÉ FELIZ.
    Goza de la vida con la mujer que amas, todos los días de tu vida fugaz que El te ha dado bajo el sol, todos los días de tu vanidad, porque esta es tu parte en la vida y en el trabajo con que te afanas bajo el sol. Ecl. 9:9
    Algunos fuimos muy maltratados en la secta y los JDs, ni se diga. Muchos nos sabemos BURLADOS, engañados, estafados. Algunos estamos enojados por el engaño que sufrimos y peor, que en cierto momento nosotros lo permitimos. Algunos quisiéramos ver destruida la secta, a Naasón y a sus cómplices refundidos de por vida en la prisión. Estamos INDIGNADOS y todos tenemos razón. A varios eso nos ha hecho hablar a unos, a dar su cara otros, a denunciar y evidenciar la falsedad de la secta y sus asquerosos líderes. Pero cuidado, cuidemos que todo lo que sentimos no se vuelva AMARGURA, la amargura en odio y el odio en venganza. La razón por la que salimos de la secta y dejamos de creer en sus doctrinas es porque no queremos vivir engañados, estamos hartos de vivir esclavizados y manipulados, queremos justicia pero sobre todo, queremos ser felices nosotros y con nuestras familias. SER FELICES debe estar sobre todo. Porque, si la venganza se vuelve tu meta, tu fin, tu propósito, solo te estas envenenando. Si el que Naasón se pudra en prisión se torna en tu pensamiento característico del día, tu obsesión; si que la secta desaparezca es tu pensamiento desde que despiertas hasta que anochece… perdóname hermano, la secta se salió con la suya, ha logrado hacerte infeliz. Por eso te invito a que denuncies si quieres, a que tengas un canal si gustas, a dar tu testimonio si lo crees necesario pero, sobre todo enfócate a ser feliz en esta vida. No saliste de ella para hacerla el eje de tu vida, todo lo contrario. Dale todo el tiempo de esos cultos a tu familia, sal a pasear. Usa todo el recurso económico que le dabas para tener mejor calidad de vida, construye, toma vacaciones, haz una carrera, viste mejor a tus hijos, haz feliz a tu esposa o esposo. Dedica la energía que le dabas a pasar mejores momentos con quien tú quieras, disfruta el producto de tu salario, “de tus afanes” que dice la Escritura. Que tu propósito en la vida sea el que Dios quiere para ti: sé feliz.

Yo no veo a un Silem García sufriendo porque te saliste, no he visto a un Silverio Coronado llorando por lo que te hizo, no imagino que los obispos del Consejo estén reunidos para lamentar que hayamos salido algunos de nosotros. Por eso.. ¡qué haces tú amargándote la vida por LLDM! Si la amargura ha infectado cada célula de tu piel ¡la secta ganó sobre ti! Y eso, seguramente sí lo están celebrando.

Por eso, subrayo el último consejo hermano y amigo que me lees:
Sea que Naasón reciba una condena superior a la que tiene, o no…
Sea que La Luz del Mundo siga perdiendo adeptos, o no…
Sea que los cómplices de Naasón sean juzgados por su complicidad y crímenes o no…

Decídete a ser feliz, lo más feliz que puedas tú y haz felices a los que te rodean porque…
¿de qué se trata la vida si no?

Afectuosamente:

Moisés De la Fuente.

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